Ha quedado en descubierto el proyecto Metal Gear del ejército de Estados Unidos que planea construir identidades falsas en Internet para difundir propaganda en su favor.
Se crearán perfiles en Facebook y Twitter para influenciar en los foros y en las conversaciones incluyendo opiniones y comentarios que defiendan los intereses del citado país. Actualmente este plan ya se habría lanzado en Irak y Afganistán. Los perfiles serán creíbles, con historia, profesión y vida personal para que sea muy difícil detectarlos. Se utilizará un programa que posibilitará que la infiltración sea masiva.
Con estas maniobras, faltas de la más elemental ética, Estados Unidos pretende manipular la opinión pública internacional empleando las nuevas tecnologías.
En consecuencia, habrá que estar alertas al admitir una nueva amistad en Facebook y desconfiar de los comentarios en favor de la política norteamericana.
Las redes sociales son una gran herramienta que bien utilizada puede liberar pueblos de la opresión, como sucedió en Egipto, donde quedó demostrado su poder que facilitó la creación y organización de los grupos que luchaban por la libertad.
La difusión de las intenciones de Norteamérica nos puede llevar a un estado de paranoia dado que no podremos distinguir si nos estamos comunicando con una persona real o ficticia.
Esta duda siempre ha estado latente en las relaciones cibernéticas pero ante un proyecto de tamaña envergadura la lógica desconfianza aumentará dificultando el creer en nuestro interlocutor e impidiendo las relaciones interpersonales.
Por suerte, como los propósitos del país del norte han salido a la luz, es de esperar que este proyecto no prospere y que los amagues de manipulación sean rápidamente neutralizados.
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