jueves, 28 de octubre de 2010

Costumbres argentinas: Mamá Lucchetti

Un buen publicista debe conocer y manejar todos los medios que estén a su alcance para hacer difusión y llegar a los  consumidores de una marca.
Las agencias de publicidad trabajan incansablemente  para instalar a su cliente en los gustos y preferencias del  público consumidor, incorporando todos los medios incluyendo las redes sociales que están en auge en estos momentos.
Una estrategia por demás exitosa es de la marca Lucchetti, una fábrica de pastas que ha tenido un verdadero suceso en nuestros días.

El comienzo…

La marca Lucchetti S.A. es una empresa chilena que  se instaló en nuestro país  en 1993, decidiendo colocarse en el mercado para competir frente a compañías argentinas más tradicionales en caldos y sopas como Mattarazzo y  Knorr.
Estratégicamente la marca haría un cambio innovador: el estereotipo del personaje de las publicidades de esos productos, mujeres perfectas sin ningún tipo de defecto, que se repiten en todos los spots, se transformaría en mujeres que se acercaran más a la vida real,  que tuvieran problemas como cualquier madre de barrio, con errores, pero a la vez, con mucho amor. Esto se logró y se produjo  una verdadera identificación en los consumidores que establecería un vínculo emocional con los personajes.

En el año 2008, la marca se consolidó y avanzó sobre sus competidoras.
Como primer paso se contrató a la Agencia de Publicidad Madre que investigaría durante un año, haciendo entrevistas para registrar los hábitos de las madres argentinas. Para mostrar esta realidad se apeló al humor y al uso de la animación, de personajes hechos de plastilina, de una familia tipo con  tres integrantes: mamá Lucchetti, el padre y la nena. Se utilizaron spots publicitarios en una campaña fuerte en su presencia mediática, gastando el 70 % del presupuesto total en los primeros meses.
La cobertura de la misma, además, alcanzó a la radio para instalar un jingle pegadizo,  a la web con anuncios en Google y ,además, a afiches en los subtes .
Cada publicidad exhibía una situación común que reflejaba a las madres en instancias cotidianas y se recurría a efectos extraordinarios en el momento en que aparecía  el producto.
En la actualidad, Lucchetti,  incorpora una cuota más de ingenio a los personajes ya creados. Llegó la hora de salir de la pantalla de los televisores y actualizarse introduciéndose  en las redes sociales  para lograr resultados exitosos. La marca se posicionaría en un ámbito desconocido.
Según una encuesta realizada entre publicitarios por la revista Target la campaña de Lucchetti se encuentra en la primera posición  en cuanto a creatividad e innovación.

Mamá Lucchetti se animaría a participar de las redes sociales con la excusa de hacer un video para subirlo a la web contando como son y que hacen un día muy especial, el domingo 17 de octubre, el día de la madre. La campaña duraría dos semanas en las que los spots publicitarios tendrían presencia en los principales programas de televisión y en las redes sociales durante todo el día, donde  los personajes publicarían fotos y videos y miles de fanáticos podrían hacer comentarios y sugerencias.
Se abrieron cuentas en Twitter y en Facebook para que los consumidores tuvieran una relación virtual y pudieran conocer más a los personajes.
Esto superó todas las expectativas ya que se formaron 130 grupos con 300.000 fanáticos y se efectuaron  80.000 descargas de emoticones en el sitio web de la marca.
Con el intenso uso de Internet y las redes sociales, la campaña de Lucchetti se ha transformado en la más innovadora y creativa de los últimos tiempos y marcará una tendencia a seguir en las futuras campañas publicitarias, dándole una vuelta de tuerca a un mercado muy difícil de conquistar y con clientes tradicionalmente conservadores. El hallazgo fue tratar a la mamá como una persona inteligente, rompiendo los moldes establecidos.
Cuando se pensaba que no había nada nuevo bajo el sol, llegó Lucchetti trayendo un soplo de aire fresco evitando caer en los reiterados estereotipos imperantes en el mercado publicitario.













jueves, 7 de octubre de 2010

Rusia prohibe la publicidad de los milagreros

Parece increíble, pero en pleno siglo XXI las brujas y los milagreros todavía son noticia.
En Rusia se aprobó una ley que prohibe la publicidad esotérica (negocio que asciende a 2.000 millones de dólares). El Estado así pone un límite a la proliferación de charlatanes.
Hace dos años fue condenado a prisión un curandero ruso que prometía resucitar a 200 niños fallecidos en el asalto a una escuela en el año 2004 a cambio de 1.300 euros por niño (valor equivalente a $7.200). Este caso no es excepcional dado que se trata de un país con una elevada fe en los brujos y existen más curanderos que médicos.
Una encuesta del mes de agosto pasado concluyó que el 20% de los rusos ha visitado alguna vez a un manosanta.
El patriarca de Moscú, de la Iglesia Ortodoxa Rusa, celebró la aprobación de la ley.


En mi opinión, no todos los que se dedican al esoterismo son estafadores. Creo que existen algunas personas que tienen poderes sobrenaturales y que la ciencia se debe encargar de estudiar estos casos inexplicables.
"Las brujas no existen pero que las hay...las hay" .

Última publicidad de Quilmes

Como es bien sabido, las empresas  necesitan vender y, para ello, las publicidades promocionan las ventajas y beneficios del producto. Apelan a diferentes estrategias: pueden utilizar a una persona famosa (actriz, modelo o deportista) para tal fin.
Quilmes, fiel a un  estilo, desde hace algunos años recurre a la idiosincrasia, costumbres y rasgos que identifiquen la nacionalidad argentina con la marca de la cerveza.
Por ejemplo, en el período de los mundiales, utilizaba la emoción y la pasión, presentando al himno argentino cantado por una hinchada futbolera y se valía de frases populares ya naturalizadas en el inconsciente colectivo como: "Dios es argentino".
En esta última campaña publicitaria, emplea una estrategia ya exitosa. Asocia los festejos por el Bicentenario con los de los 120 años de la empresa, haciendo hincapié en los valores patrióticos y de algunos próceres y marchas para fortalecer así su marca.
A pesar de algunas críticas, como la de un concejal de la ciudad de San Lorenzo, en la provincia de Santa Fe, que peticionó al Concejo Deliberante que labrara un acta de reprobación de la publicidad por considerarla ofensiva para los próceres. 
En definitiva, la empresa cervecera aplica las técnicas de la publicidad emocional y se vale de los sentimientos de los argentinos provocando sensaciones encontradas.
Puede parecerle a algunos una falta de respeto pero lo cierto es que este polémico spot aparenta ser efectivo.





Fuente:

domingo, 3 de octubre de 2010

Publicidad en Argentina

Según un informe realizado por Starcom  Mediavest Group que analiza las conductas de los televidentes en Argentina,  la publicidad influencia más a las mujeres y a los niveles socioeconómicos bajos.
El 30% de las personas que viven en el interior del país le presta atención a la  TV.
Las provincias más influenciables son: Corrientes, Salta y Santiago del Estero.
El estudio documenta que las mujeres y los pobres son los que tienen mayor exposición a la televisión.
Se llegó a la conclusión  de que el 58% de las personas que viven en el interior del país ven televisión entre 1 y 4 horas diarias durante la semana y que los fines de semana esa cantidad aumenta, debido al mayor tiempo libre.
Los noticieros concentran la mayor preferencia de audiencia, seguidos por películas, telenovelas, series y programas de entretenimiento.
Los programas de tv preferidos son: Intrusos  23%, Los Simpson y Dr House 6,94% y Showmatch 6,78%.


En mi opinión el hecho de que en el interior del país las mujeres y los pobres pasen gran parte del día mirando televisión se debe al  mayor  grado de desocupación y a que, este sector de la población, no tiene acceso a otro tipo de entretenimientos (cine, teatro, Internet).
Es lamentable constatar que los programas más vistos sean de tipo pasatista y que no hagan un aporte positivo al desarrollo cultural de los televidentes.
La programación con un elevado nivel artístico  no cuenta, al parecer, con la preferencia de la audiencia y, por lo tanto, tampoco con el auspicio de las empresas publicitarias y, en consecuencia, su influencia es escasa en las clases sociales bajas. 
Este estudio refleja que una gran parte de la población argentina  se encuentra excluida de los eventos culturales y se entretiene mirando a Rial y a Tinelli.
Es de esperar que las cosas cambien, positivamente, en un futuro cercano. 



Invasión de telemarketing

No hay nada más molesto que escuchar el sonido del teléfono cuando estamos muy ocupados, y mucho más irritante todavía es que, al atender, pensando que es  una llamada importante, descubramos que se trata de un vendedor de una empresa telefónica que nos quiere convencer, a toda costa, de que nos conviene contratar  un plan de telefonía celular o de Internet de banda ancha.
Los ejemplos son numerosos: las citadas empresas telefónicas, de televisión por cable, de educación privada, aseguradoras, encuestadoras, etc.
El malestar es enorme  porque invaden nuestra privacidad, nos interrumpen en nuestras tareas  y nos hacen perder nuestro valioso tiempo.
El mismo efecto producen los constantes mensajes de textos con publicidad en nuestros celulares.
No me parece efectivo este método publicitario que logra que, en lugar de desear comprar ese producto,  nos dé ganas de insultar al vendedor, aunque, muchas veces, se trate de una cinta grabada y no podamos cumplir con nuestro deseo. Sólo, nos queda cortar lo más rápido posible.
En algunas ciudades (Buenos Aires y, más recientemente, Rosario) existe un registro de personas que, voluntariamente,  se inscriben para que sus números de teléfonos no puedan recibir este tipo de llamados. El inconveniente es que se trata de un trámite personal y mucha gente no está dispuesta a concurrir a una oficina para realizarlo.
Creo que nuestros representantes deberían encargarse de este tema  que incluye  la protección de datos personales y el respeto  a la intimidad.
Cabe recordar  que el Código Civil dice, en su artículo 1071 bis, que: "el que, arbitrariamente, se entrometiere en la vida ajena,  perturbando, de cualquier modo, su intimidad, será obligado a cesar en tales actividades y a pagar una indemnización que fijará, equitativamente, el juez, de acuerdo con las circunstancias".
Sería bueno que aprendiéramos a defender nuestros derechos y que no tuviéramos que resignarnos  y seguir tolerando esta invasión.
Para terminar, poniendo un poco de humor al asunto, veamos cómo se resuelve este problema en manos de un comediante americano.